domingo, 1 de junio de 2008

LOS CUENTOS DEL FINADO ARNULFO













Tenía una especie de biblioteca pública en una zona verde de mi barrio.Colocaba un gran tablero de madera recostado a un árbol,de un costado a otro de él tendía trozos de piola -de la que usábamos para elevar las cometas- y acaballaba en ellas los cuentos de vaqueros,de heroes de la selva,del mar,de guerreros estelares,de detectives,de duendes y villanos,de seres habitantes de otras dimensiones,a las que acceder,costaba poco.Ponía especial cuidado en dejar en el lado visible del potencial cliente,la carátula,la cual era una especie de "triller" de lo que esperaba dentro.
Se llamaba don Arnulfo. Alquilaba los cuentos a quince centavos para leer en el sitio y a veinte para llevarlos a casa. Lo más común era leerlos en el sitio,pues ya era un logro extraordinario para cualquier niño del barrio,conseguir los quince centavos.
Mientras la gran mayoría de niños preferían jugar a la pelota,una estraña cofradía de cinco o diez, ocupábamos los bancos de madera de la biblioteca de don Arnulfo,sumidos cada uno, en estricto silencio,en su viaje personal por paises lejanos, acompañando y gozando con el heroe escogido de entre las piolas,de emocionantes aventuras con la seguridad de no sufrir daño alguno.
Allí conocí las peripecias de Hopalong Cassidy,Red Ryder,Roy Rogers,Gene Autry,Chanoc, Alma Grande el yaky justiciero,El látigo negro,El llanero solitario,Robin Hood,Kid Montana y cientos más.
Era un niño privilegiado,pues mi padre había nacido afectado con el síndrome de la lectura,y así, luego que los dos habíamos devorado las fotos y textos de Life, Gramma,Bohemia, las selecciones del Reader's Digest,me enviaba donde don Arnulfo los fines de semana,con la consigna de alquilar varios cuentos para leer en casa.Tome este peso y alquile cinco cuentos -me decía- ¿de cuáles papá?;traiga tres de vaqueros,uno de la selva y busque uno de Flash Gordon...¿Flassh gordon?..., bueno,de Roldan, que es lo mismo, así se llamaba en mi época,decía.
Feliz, como estaba seguro que nadie podía serlo en ese momento,corría hasta donde don Arnulfo y me daba a la tarea nada fácil de escoger los cuentos,recurriendo a la memoria para no llevar aquellos que ya habíamos leído.
Al llegar a casa con ese preciado tesoro,los extendía sobre alguna mesa y esperaba a que mi papá escogiera el suyo para iniciar el rito y posteriormente hacerlo yo.Generalmente los domingos, mi papá leía recostado en su cama, con la almohada doblada contra la baranda y mi mamá le colocaba un vaso con café y una cajetilla de cigarrillos piel roja junto con la caja de fósforos el diablo en un pequeño nochero.
Yo me sentaba a los pies de la cama, y lo mismo que él,me sumergía en la vida y aventuras del héroe de turno y casi no escuchaba a mamá cuando me llamaba para encargarme algo de la tienda; doblaba entonces la punta de la hoja donde me encontraba -costumbre que jamas pude corregir y me costó muchas reprimendas de profesores y bibliotecarios- y salía presuroso a cumplir el encargo para regresar lo más pronto a continuar con mis aventuras por desiertos,selvas, mares y tenía la impresión que los héroes,complacientes,esperaban mi regreso para continuar la acción; la imagen se congelaba, haciendo uso de una tecnología que aun no existía.
Pasado algún tiempo, don Arnulfo fué incluyendo variantes,como secciones en su biblioteca;colocaba en un rincón unos libros pequeños, sin imágenes,solo letras,que también eran de aventuras de vaqueros;las historias de don Marcial lafuente Estefanía.Junto a estos, unos libros gruesos,los tomos de santo, el enmascarado de plata,estos si tenían imagenes.El descubrimento extraordinario de los libros sin imagenes fueron don Julio Verne y don Emilio Salgari.Devoré en pocos dias a Sandokan el tigre de la malasia,al capitan de quince años y todos los de piratas y aventuras en islas desiertas,globos y submarinos.
Mi padre, preocupado por haberse leido todos los cuentos de vaqueros y demás héroes,aceptó probar la nueva propuesta y empezó a consumirla, aunque su alquiler era más elevado.Esta nueva gama de lecturas,activó de forma extraordinaria el desarrollo de la imaginación, al no tener imágenes.
Por estas mismas fechas,aconteció algo que cambió la rutina de lectura en compañía de papá y que yo justificaba aduciendo el mayor costo de leer en casa.Apareció un domingo con un portaviandas con la comida para don Arnulfo;supe que era su esposa por lo que conversaban.Era una mujer mucho más joven que él.Cuando la ví el primer día, sentí una extraña fatiga que no se parecía en nada a la causada por el hambre -con quien ya había tenido tratos- y que se calmaba cuando ella se marchaba.
A partir del primer día,estaba atento para acudir a alquilar algún cuento-así fuera repetido-y esperar a que llegara con el portaviandas y verla y sentir esa extraña sensación de fatiga, que a decir verdad, no me disgustaba.
Pasaron muchos días de fatigas insatisfechas, hasta descubrir un calmante,-pasajero eso sí-para aquella sensación que me causaba la visión de la mujer de don Arnulfo.
Un día domingo, mientras alquilaba algunos cuentos para mi papá,el señor Arnulfo empezó a sentirse mal;dijo sentir mareo y nauseas;su esposa llegó justo en el momento que empeoraba su estado y le llevó en un carro rumbo al hospital.Ese día falleció don Arnulfo.
Durante algún tiempo, la biblioteca lúdica de mi barrio estuvo cerrada.Mi padre y yo sentimos demasiado su falta.
La familia de don Arnulfo terminó por marcharse del barrio;días después, descubrí en un cajón del armario, los cuentos que había alquilado el día de su muerte.Los guardé entre mis cuadernos de primaria.Ocacionalmente los encontraba y repasaba junto con los recuerdos que contenían de aquella preciosa época de sueños infantiles y despertares juveniles.
Tal vez trascurrió más de una década,cuando acompañando a mi mamá al mercado,nos tropezamos con una señora.Mi madre le saludó con amabilidad y escuché los pormenores que compartieron,las preguntas sobre las respectivas familias que finalizaron con mi presentación y el consabido!cómo pasa el tiempo!.
al despedirse mamá y la señora,tenía yo muy claro que se trataba de la viuda del finado Arnulfo y supe entonces cual era la causa de la fatiga que me provocaba en mis años de infancia próximos a mi adolescencia, el verla.
Se había trasformado en una hermosa mujer madura.Mi madre en casa,comentó con mi papá de aquel encuentro y escuché entre otras cosas que la señora jamás se había vuelto a juntar con alguien, bastante extraño en los tiempos que corrían.
Una extraña obsesión me invadió.Obsesión por conocer detalles de la vida de aquella señora.Así, muchos dias invertí en acercarme al mercado con la esperanza de volver a encontrarla.
Y llegó ese anhelado día.Cuando le ví no dudé en acercarme y buscar entablar charla;fué algo tan sencillo como agradable.
Uno de tantos días en que nos encontramos de común acuerdo para charlar y contarnos algo de nuestras vidas,le comenté que yo guardaba algunos cuentos que pertenecían a su esposo.Se interesó por ellos y quedamos en que la visitaría en su casa para llevárselos.Ese día me agradeció mucho que le llevara los cuentos pues ella había perdido todos los demás al prestarlos a amigos que jamás los devolvian y en los continuos trasteos de casa en casa de alquiler.
Conversamos sobre muchas cosas y fué inevitable nombrar aquella sensación que su presencia provocaba en mí cuando ella le llevaba la comida a su esposo;se rió de tal forma que me hizo sentir tremendo desconcierto.Desconcierto que aumentó cuando me preguntó si aun su presencia me provocaba aquella fatiga,cuando prometió darme un remedio que podría resultar peor que la enfermedad,que solo tendría que contarle cada cuento que yo había alquilado y leído en mi infancia y que no importaba que fueran más de mil, incluso si eran mil y uno no importaba porque el tiempo de las cosa reales se detiene, no avanza,cuando uno se sumerge en viajes por parajes ignotos, de paraísos soñados,perdidos, buscados, donde nada ni nadie puede causarle daño........

lunes, 5 de mayo de 2008

SON PADRES



En una ciudad moderna,en un gran pais,suena el despertador
en un pequeño rancho en una vereda perdida en las montañas
en una elegante y cómoda casa;un hombre acorde con esa casa,muy elegante,sale
de un hermoso pais,el canto del gallo y los pájaros,indican a sus habitantes que
temprano en la mañana en su carro para llevar a uno de sus hijos al colegio.Antes
empieza un nuevo día.Un hombre de piel curtida por la intemperie,se prepara
de marchar,se despide con un beso de su esposa y el más pequeño, quien lloriquea
para marchar a su trabajo;un trago de café y una caricia al niño que lloriquea en
ante la ausencia inevitable.Es un buen padre de familia,sin duda.Sorteará con
brazos de la madre,son su despedida.Con sus herramientas al hombro y una
poca o mucha paciencia, los inevitables trancones en el tráfico vehicular de las
mochila con alimentos,se dispone a sortear los obstáculos que ve a diario:raices
grandes urbes modernas,desarrolladas, en el pinaculo de la civilizacion,hasta
de árboles,mosquitos del amanecer,telarañas tejidas en la noche que se adhieren
llegar a su sitio de trabajo en una gran empresa.Su oficina es en realidad un
a su cara y manos;nada de cuidado.su trabajo:limpiar, abonar,consentir las
laboratorio donde diseña apoyado en informes anatómicos y mecanicos y
plantaciones de cuyos frutos muchos se han de beneficiar aun en paises lejanos;
valiendose de la más moderna tecnología,un producto que luego de fabricado será
casi en su totalidad se venderan,solo se regalaran si acaso, los proximos a
enviado a paises lejanos:algunos vendidos a intermediarios,donados a amigos,
perderse.Cuando acaba su jornada,al fin de la tarde,emprende el camino de
y muchos se canjearan por otras mercancias;es uno de los productos estrella de la
regreso a casa,donde le esperan su esposa y su hijo;absorto en su recuerdo,desvía
empresa para cual labora:serpientes con cuerpo de plástico y entrañas metalicas
sus pasos fuera del camino y es cuando siente clavarse en sus carnes miles de
que no muerden,escupen miles de colmillos de acero que se clavarán en los
colmillos de serpientes que no existen en sus peores pesadillas;serpientes que se
blandos tejidos de piernas y genitales de quien tenga la desgracia de pisarla;
elevan al ser pisadas y escupen su vaho asqueroso que lo sume en un sueño
romperán igualmente los tejidos oseos,causarán con su escupitajo asqueroso un
profundo y horroroso donde acogerá a su esposa y a su hijo con los muñones de lo
dolor millones de veces superior al causado por la mordedura de una serpiente
que fueron sus piernas.Cuando despierte de la pesadilla, deseará no haberlo
comun;infectará la mente de la victima, cuando esta comprenda que ha sido
hecho nunca;deseará sumirse de nuevo en aquel sueño donde caminaba por los
rebajado a la categoría de invalido,de dependiente absoluto,de carga social,
montes libremente,conocedor de los peligros propios de su montaña,con
familiar;de muerto en vida.El creador de este engendro,al término de su jornada
serpientes que huyen ante la presencia humana,pues nadie ha manipulado su
regresará a su casa, donde le esperan ansiosos su esposa e hijos,ignorantes e
esencia,programandola para causar muerte.
inocentes,del trabajo de su padre para ganarse el pan que les dá la vida.

domingo, 27 de abril de 2008

LA ESQUINA

Despuntaba la década de los setenta.Cali había hecho sus juegos panamericanos.Que viet-nam terminaba,era importante para muchos.Algo nos llegaba desde el mundo exterior.Scoot Mackenzie y su melodioso "san francisco";"papaupa" del quinto mayor, "a papá cuando venga" de mon rivera;el extraordinario Ray Charles y su pegajoso "hit the road jack", que en la calle no tardaron en llamarlo "el mono mono", ante la dificultad del imaginario popular para desmenuzar el no more,no more,no more del estribillo, además de algo de un tal Cat Stevens,quien luego nos deleitaría con su "moon shadow";algunos ,casi niños aun,presentíamos la adolescencia con algo de temor. En la esquina,bajo el palo de mango del anden de misiá teresa,los muchachos mayores de veinte,se reunian para charlar de algo que superaba a todo lo llegado del exterior:la música de richie rey, su boogaloo, y claro, para disfrutar del poder y la riqueza que les proporcionaban unos cigarrillos arrugados y sin marca conocida que ellos mismos elaboraban. De todos éstos muchachos, "nueva york" era lo más destacado.Vendía discos en un almacen de la quince.Se conocía todo lo relativo a la pasta que llegaba del norte.Se ganó el remoquete por su jerga cargada de vocablos ingleses los cuales españolizaba con su estilo particular.Vivía soñando con "los yores";con despegar "pa'la yunai". Cuando llegaban de trabajar, los muchachos de la esquina se reunían después de comer para comentar lo último de la melodía y crear nuevos pasos para el fin de semana si había alguna rumba,era su rutina.Algunos escapaban del ghetto y se iban a la univalle de san fernando a disfrutar del talento nacional con "alma"o "el expreso del oeste".Los menores, de alguna manera admirábamos su aguaje, su ritmo, su trasgresión. Un día de tantos, cayó la bomba en la cuadra y como no en la esquina:!viejo rodri despega pa'l norte! Rodrigo era como el hermano gemelo de nueva york, y entre unas y otras le prometió a éste:"cuando llegue y me ubique, lo patrocino viejo nueva..". Y viejo rodri viajó y pasó un mes y dos y un año,y nueva york antes de llegar a su casa luego del trabajo,arrimaba donde la familia de rodrigo y que qué han sabido? que está bien m'ijo, que muchos saludos; y nueva york,me lo saluda; claro m'ijo con mucho gusto!. Y la casa de rodri tuvo dos pisos y antejardin de cemento; y llegaron fotos de viejo rodri junto al carro que se compró; y que rodri se casa con una muchacha mejicana, y que tienen un niño, y que les llegó el segundo....nueva york seguía vendiendo discos en la quince y esperando el patrocinio. Y cayó la segunda bomba en la cuadra y bajo el palo de mango:viejo rodri viene.... Un sábado, los muchachos de la esquina vieron llegar dos taxis a la casa de rodrigo: en uno venian una mujer de cabello muy negro y dos niños,en el otro un rodrigo de piel desteñida y muchas maletas.En la noche cuando nueva york lo supo no dudó un minuto en ir a saludar; mejor no lo hubiera hecho:está dormido m'ijo, es que estan muy cansados!. Y así fué por varios dias cuando solo se veía a rodrigo del antejardin al taxi y viceversa;a veces levantaba la mano como un remedo de saludo a la esquina.En silencio todos pensaban que "viejo rodri no es el mismo" y con mucho de orgullo y algo de dolor trataron de seguir sus vidas.De todos, el más afectado era nueva york; cuando partió rodrigo de regreso a los yores, no hizo ningún comentario; empezó a ausentarse más y más de la esquina, en parte huyendo de las bromas con respecto a su patrocinio fallido;pasado un tiempo,nueva york no volvió a la esquina y los muchachos al principio lo extrañaron y al final siguieron sus vidas, su rutina. Luego de casi un año estalló una bomba más fuerte:!nueva york despegó pa los yores!!. Y todos que como así, y ese de donde sacó la plata;eso si está raro!.A los pocos días tuvieron la respuesta.Un carro llegó una noche a la esquina y unos tipos "de esos que cuando niños sus mamás no los querian y de grandes andan repartiendo bofetáas" se bajaron de él y empujaron a los muchachos para que subieran. Dos dias estuvieron perdidos los muchachos.Cuando regresaron, algunos habían perdido sus trabajos; por un tiempo largo no volvieron a la esquina.Por la señora de la tienda se supo que los había detenido el F2 y que muy comedidamente, como era su costumbre, les preguntaron por la plata y los muchachos que cual plata;que la que les sobró de la venta de los discos y ellos que cuales discos; entonces que amarrenlos en una tabla y metales las cabeza en el estanque y ellos que casi se ahogan pue si saben nadar pero no amarrados y además si es surf, eso es con un solo pie amarrado a la tabla y no todo el cuerpo;entonces que sueltenlos que estos no saben nada, pero si los volvemos a ver en la esquina,vamos a practicar beisbol en vez de surf, pero con sus bolas. Poco tiempo duró la dicha de nueva york;cuando apenas le había dado unos mordiscos a la gran manzana, le apresaron y deportaron directo a villanueva. Luego de tres o cuatro años, salió nueva york y volvió a la esquina,pero ya el panorama desde el puente,mejor dicho, desde el árbol, era diferente;richie rey se las veía fuerte con ismael miranda,hector lavoe y el conde rodriguez;además se permitian escapadas donde eric clapton,joe coker y sus perros rabiosos,exuma y sus delicias de la luna de moonberry,los dias tristes de los beatles, el camina no corras de los ventura y carlos santana con su mujer de magia negra, casi nos hacía olvidar al negro hendrix. Algunos de la era de nueva york, habían despegado para venezuela.Plétorico de necesidades y nostalgia, logró conseguir trabajo en un taller de carros,lijando.Años después al regresar de europa,luego de otros tantos de ausencia, le encontré más viejo,canoso y aplastado por la nostalgia de su new york. Mientras bebíamos unas cervezas bajo el palo de mango,ojeando una revista donde mostraban la destrucción de las torres gemelas,decía como para sí mismo:"estos manes deben de estar creizys,como van a destruir semejante símbolo,si cuando yo estuve en nueva york, luego del lunch o el over time las visitaba y era un espectaculo beatiful". Comprendiendo su tristeza, le dije:viejo nueva, esperemos que los próximos que despeguen de la esquina, lo hagan para la polinesia, y cuando vuelvan,nos busquen bajo el palo de mango del andén de misiá teresa, y nos cuenten brother, si allá se comen el lunch,trabajan over time o si se cagan en la leche tio!.